«El otoño es una segunda primavera, cuando cada hoja es una flor»
-Albert Camus
Hoy ha sido un regalo, de esos que el calendario tiene a bien hacerte cuando menos te lo esperas. O esa carta que te sorprende en el buzón, aunque sea el de outlook.
El otoño llega a su ecuador y equidista el equinoccio del solsticio. El sol ya no arde, las hojas alfombran el camino y cada pisada sobre ese manto color fuego desprende olor a lluvia pretérita.
Hoy te he imaginado cerca, he peinado todos los senderos y he mirado debajo de esas alfombras de hojas para ver dónde se escondía tu abrazo.
He querido mostrarte lugares por los que quizás ya pasaste. Y he escuchado tus mentiras piadosas diciendo que no era así, empatizando con la ilusión de aquel que ve abrir su regalo.
MELANCOLÍA
Me siento, a veces, triste
como una tarde del otoño viejo;
de saudades sin nombre,
de penas melancólicas tan lleno…
Mi pensamiento, entonces,
vaga junto a las tumbas de los muertos
y en torno a los cipreses y a los sauces
que, abatidos, se inclinan… Y me acuerdo
de historias tristes, sin poesía… Historias
que tienen casi blancos mis cabellos.
Manuel Machado
